Rihanna debería dejar de beber y de fumar. El ajetreado ritmo de trabajo y la activa vida social no le dejan ni un segundo para descansar; la chica es joven y está llena de energía, pero debería aprender a relajarse un poco.
Cada minuto que tiene libre lo emplea en llamar a los amigos y salir de juerga y en su día a día no para de ir de un estudio a otro grabando temas.
La cantante de 'Rush Rush' ha tenido que suspender uno de sus conciertos en Suecia debido a su ingreso en el hospital… El médico le ha dicho que sus malos hábitos ya le están pasando factura y eso, con veintitrés años es más que alarmante.
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